Hoy festejamos el día Internacional del hombre. Este día comenzó a celebrarse en 1999, por el Dr. Jerome Teelucksingh en Trinidad y Tobago. Eligió esta fecha en honor a su padre, siendo día de su cumpleaños. Además de ser conmemoración en que el equipo de fútbol local había unido al país motivados a calificar para la Copa Mundial de la FIFA 19891.

Y pese a que ya es un cuarto de siglo desde que se comenzó a festejar, el 19 de noviembre aún pasa desapercibido para algunos, tal vez por el daño que el machismo ha hecho no sólo a las mujeres, sino también a los hombres.

Sin embargo, es importante recordar que hoy es una oportunidad para reconocer a aquellos hombres ejemplares que han aportado algo positivo a este mundo, sean sus aportaciones famosas o no.

Cada padre de familia que ama y respeta a sus hijos y esposa, cada papá soltero (porque también los hay), cada hombre que en su historia ha tenido que enfrentar la censura de sus sentimientos de tristeza y vulnerabilidad, bajo la creencia de que “llorar es de débiles y los hombres no lloran”.

Es un buen día para recordar que, como mujeres, no pedimos ser superiores a ustedes hombres, sino ser reconocidas y reconocidos como igualmente valiosos y dignos de respeto; pese a que haya diferencias inherentes a nuestra biología.

Como psicóloga puedo compartir mi reconocimiento a cada hombre que, en consulta, abre su corazón y muestra su lado más vulnerable, heridas que no siempre son reconocidas. A veces cuesta recordar que cada hombre fue niño, y desde niño tuvo que afrontar la vida en un mundo lleno de creencias y costumbres que quizá no sean o no fueron lo más saludables, pero aun así era necesario adaptarse para sobrevivir.

En el ámbito de la salud mental, aun suele haber más mujeres que hombres en consulta, no es de extrañar que sea mayor el índice de suicidios en varones, si se les ha enseñado a callar sus sentimientos, bajo el mandato de ser “fuertes”, entendido esto no desde la fortaleza que la vulnerabilidad puede generar, sino desde el “aguantar vara”.

Reconozcamos también a cada niño, cuidemos de ellos, recordando que no siempre es fácil ser un pequeño varón en un mundo donde aún hay estereotipos de género.

Gracias a todos los hombres que han hecho del respeto, bondad y empatía, parte de sus valores, haciéndolos vida en el trato hacia sus familias y su entorno. A los que han reparado o al menos intentado reparar el daño que otro hombre (o mujer) ha hecho.

Gracias a quienes utilizan su fuerza masculina para crear y no para destruir. Gracias, padres adoptivos, abuelos que paternan, maestros que son ejemplo, médicos, agricultores, obreros, y gracias a enfermeros, arquitectos, bailarines y hombres cuya profesión u oficio aun es juzgada como “exclusiva de mujeres o gays” bajo la idea errónea de que ser mujer o gay es algo “inferior”.

Gracias a todos los hombres que se permiten mostrar su lado sensible y tierno, pese a las críticas que aún existen ¡feliz día del hombre!

Ana Karina Camacho Duarte.
Psicóloga en consultorio privado en “Nakarópari Psicoterapia”
Lic. Psicología CP: 7597096 (UJED).
Miembro activo del Colegio Mexicano de Profesionistas de la Psicología A. C. Capítulo Durango.
Maestra en Terapia Guestalt. Ced. Prof. 12351333. (INTEGRO).
Desde mi experiencia personal como paciente oncológica, inicié en redes sociales el proyecto Corazones Resilientes MX, compartir, acompañar, informar y fortalecer a quienes viven o acompañan procesos de cáncer, apenas estoy iniciando.

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Fuentes de referencia:

https://internationalmensday.com/

https://www.conasama.salud.gob.mx/cnps/Img/suicidio.pdf